Anteayer me vino un ataque de risa, lo mas bizarramente rosa que me paso en la vida, fui feliz, fui mujer, y lo mezcle con un ataque de risa tan infantil y tristemente pelotudo como los libros de juanito... totalmente rosa, totalmente bizarro, totalmente yo... totalmente dual, princesa-puta, monstruo-hermoso, retorcida-moralista, superficial-profunda, fuerte-debil... muerta, y ultimamente VIVA... increible, rosa, ge-nial...
Luego cai en la realidad de vuelta, en MI realidad porque sentirte orgasmica y pelotuda es aislarme de mi naturaleza problematica y obviamente todo lo que sube... tiene que bajar, no? atracona y vomitiva me senti al otro dia.. galletitas de frutilla, galletitas cracker dieteticas, empanadas de carne, un litro de fanta, jugos gastricos y varios cigarrillos fueron mi bajada a tierra, una bajada dolorosa, hedionda, sangrienta, triste y al mismo tiempo feliz, despues de todo eso me senti randomica y feliz..
Hoy en cambio... todo es decididamente de un precioso rosa chicle, soy un ser bizarramente rosa y feliz, un cacho de rojo porque sigo teniendo a ese monstruo vomitivo dentro de mi pero al mismo tiempo es como un dragon chiquito adorable y dormido que se despierta solamente para recordarme ciertas cosas de mi y quemarme el orto, pero todo se equilibra con algo tan simple tan pelotudo tan complejo y tan importante como un leoncito randomico de la vida que es lo mas, aha, yo hablo de dragones dormidos que me queman el orto y un leoncito tierno y randomico, es lo mas loco de la puta vida, ultimamente no ando muy diestra con mi lexico y mis metaforas, simplemente mis pires son menos complejos, tengo miedo de estar perdiendo mi perspicacia, en realidad me corrijo, alguna vez la tuve? no lo se, no me importa tampoco, por primera vez en mi vida me chupa un huevo la existencia de cualquier ser vivo menos la de mi leoncito, (el responsable del orgasmo pre-ataquederisabizarro) y el monstruito bizarro randomico feliz y completamente rosa que soy yo, rosa chicle, pegajoso, dulce, cute, fastidioso y ahora mas que nunca vivo...